Como vimos las esculturas ecuestres son aquellas en las que se representa a una persona montando a caballo. Este tipo de esculturas se hicieron muy populares durante el Imperio Romano, para exaltar la figura del emperador, al que se retrataba, por eso este tipo de representaciones se denominan también retratos ecuestres.
Luego, las esculturas ecuestres fueron desarrollándose en diferentes períodos conservando esa cualidad para destacar la figura del héroe, vinculado a hechos históricos, batallas o la exaltación del prócer de la patria. En este tipo de representaciones lo evocativo trasciende la propia representación.