Transcripción: 

Cuentitis aguda presenta. 

Un experimento con imanes para niños, un experimento que podemos convertir en un truco de magia. Como sabes, materiales como el hierro o el acero son atraídos por el poder magnético de los imanes y esta atracción puede ejercerse en todas direcciones y vamos a comprobarlo.

El objetivo de este experimento es lograr que la aguja flote en el aire sin llegar a tocar el imán. Necesitaremos un bote ancho con la tapa de hierro, un imán potente, un hilo y una aguja.

En primer lugar colocaremos el imán en la parte interior de la tapa del frasco, enhebramos una aguja y con un poco de celo o un gómez pegamos el hilo al fondo del tarro. La parte más delicada del experimento será medir bien la longitud del hilo para que quede tenso sin que la aguja llegue a tocar el imán, tampoco debe ser demasiado corto porque si no la aguja podría quedar fuera del campo de atracción o campo magnético del imán y no funcionaría.

Ahora tapamos el frasco y le damos la vuelta, verás que inmediatamente la aguja es atraída por el imán. Pero, ¿qué sucede si damos de nuevo la vuelta al frasco? Como ves, la fuerza del magnetismo se mantiene y da la impresión de que la aguja flota en el aire, parece magia

verdad. Pues, vamos a aprovechar el experimento para hacer un truco de magia a tus amigos, sólo tenemos que colocar un círculo de cartulina blanca en la tapa para ocultar el imán.

Y vualá, ya tenemos nuestro truco mágico. ¿Te ha gustado?