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¿Qué hago con el lenguaje?

Foto de Maturana

 

Selección de texto de Humberto Maturana

Lectura fácil y escucha

Lenguaje y realidad: El origen de lo humano

"Lo humano surge, en la historia evolutiva del linaje homínido al que pertenecemos, al surgir el lenguaje. Como todo ser vivo existe como un sistema dinámico en continuo cambio estructural, el modo de vivir que define a una especie, a un linaje, o a un sistema de linajes, se da como una configuración dinámica de relaciones entre el ser vivo y el medio. Al surgir el modo de vida propiamente humano, el conversar como acción pertenece al ámbito emocional en que surge el lenguaje como modo de estar.

Las Realidades

La existencia humana en el lenguaje configura muchos dominios de realidad, cada uno constituido como un dominio de coherencias operacionales explicativas. Estos distintos dominios de realidad son también dominios de quehacer que generamos en la convivencia con el otro y que, como redes de conversaciones (redes de coordinaciones de acciones y emociones), constituyen todos nuestros ámbitos, modos y sistemas (instituciones) de existencia humana. En estas circunstancias la realidad en cualquier dominio es una proposición explicativa de la experiencia humana.

Las Emociones

Las distintas acciones humanas quedan definidas por la emoción que las sustenta y que todo lo que hacemos lo hacemos desde una emoción. Todo quehacer humano se da en el conversar y lo que en el vivir de los seres humano no se da en el conversar no es quehacer humano. Así, al mismo tiempo, como todo quehacer humano se da desde una emoción, nada humano ocurre fuera del entrelazamiento del lenguajear con el emocionar, y, por lo tanto, lo humano se vive siempre desde una emoción, aun el más excelso y puro razonar.

Lo Racional

En la experiencia cotidiana la razón o la racionalidad nos aparece como una propiedad constitutiva de la conciencia humana. En la historia evolutiva humana, sin embargo, el razonar surge con el lenguaje en las regularidades de su operar. (…) En la vida cotidiana nos movemos de un dominio racional a otro en el curso de nuestro emocionar, muchas veces sin darnos cuenta. Por esto, el fluir de los discursos racionales en las interacciones humanas depende del fluir emocional de las conversaciones en que éstas se dan"

(Maturana, H. 1989, p.77).