En 1816 la Provincia Oriental se estaba organizando bajo las órdenes de Artigas y los distintos cabildos.
Mientras tanto el Imperio portugués con ayuda de algunos porteños y montevideanos, que no se beneficiaban con el Gobierno artiguista, planifica la Invasión.
Tanto las fuerzas artiguistas como el ejército portugués tenían una estrategia de guerra.