Inmigrantes

Muchos inmigrantes descubren, al llegar al territorio de acogida, que la deuda que contrajeron en sus países al "comprar" su viaje y sus "papeles", les obliga a trabajar sin remuneración ni derecho alguno y de forma ilegal.

Esta es una de las formas de esclavitud más comunes en los países desarrollados; sobre todo en las regiones industrializadas que contratan a personas en "situación ilegal" para explotarlos en su exigencia laboral, pagándoles poco e, incluso, en muchos casos, exponerlos a situaciones sanitarias excesivamente perjudiciales para la salud: a esto se refieren en muchos casos los industriales cuando hablan de "mano de obra barata". 

Si estas personas explotadas (en situación de esclavos) protestan son denunciados a las autoridades y expulsados del país por ser inmigrantes ilegales.

Artículo 23.1: Toda persona tiene derecho al trabajo, a la libre elección de su trabajo, a condiciones equitativas y satisfactorias de trabajo y a la protección contra el desempleo.