Junta de Montevideo de 1808
Esta Junta fue presidida por Francisco de Elío, en la que se proclamaba fidelidad a Fernando VII. Con esta acción se alejaba de lo que sucedía en Buenos Aires.
Además, en esta junta, se reconocieron la igualdad de derechos políticos entre criollos y españoles, también se estableció la unidad política de la Banda Oriental al quedar toda bajo la jurisdicción de Montevideo.
Esta Junta fue un antecedente muy importante para el movimiento juntista de 1810 en Buenos Aires, considerado como el puntapié inicial para el comienzo de la Revolución Hispanoamericana.